El sol sale, los rayos de luz atraviesan mi ventana, otro día comienza. Me despierto, me doy vuelta en la cama y trato de seguir durmiendo. No quiero despertarme, no tengo ganas de levantarme aún..
A veces, sabemos enojarnos, hasta insultar esos primeros rayos de sol.. Sabemos cerrar las ventanas, correr las cortinas y taparnos con las sábanas.. Pero es hermoso ver que el sol brilla, que estos destellos de luz aún brillan sobre tu cara.
Ustedes dirán "claro, está diciendo esto porque queda bonito", o "es lo correcto", y seguirán con el famoso "pero ella qué sabe"... "Qué sabe de mi vida?", "Qué sabe de la vida en general?", "Seguro que ni entiende de las verdaderas cosas que importan".. y si, te lo acepto! Qué puedo saber yo de tu vida, de lo que en realidad te preocupa o te aterra? Pero es algo que nos pasa a todos, eso de decir: "Nadie me entiende, estoy solo".
No, te puedo jurar que en esta vida nadie está solo.. Hasta cuando te sentís el único en el mundo, en el universo, siempre está presente ese amigo fiel; esa prima lejana que, aunque no te hablas tan seguido, ella piensa en vos; esa abuela que no te deja de querer y estar con vos a cada momento.. Cada uno tiene una persona en la que, en momentos de tristeza, se refugia.. Y qué puedo decir, yo lo hago en mis amigos.. Esa familia que uno elige..
La amistad es el mejor regalo que hay en el mundo. No puedo comparar nada con ello.
No es que tenga muuuuchos amigos, pero diría mi mamá: " los buenos amigos se cuentan con una mano y sobra".
Cuando yo escuché esto de labios de Ana, mi madre, me asusté, y me preocupó.. Me sentí sola, sin importancia. Sentía que determinadas personas tenían millones de amigos, y que yo "que contaba con una mano y me SOBRABA!"
No, si te lo pones a ver así, es depresivo.. Pero es una percepción, percepción deprimente! Por lo tanto, poco saludable.
Volviendo, yo tengo un montón de amigos, cientos de conocidos; pero buenos amigos, leales y verdaderos, que saben comprenderte, están con vos en las buenas y las malas, y que con una mirada ya se dicen todo, son pocos. De esos amigos te aseguro que me sobra una mano para contarlos :)
Te hablaré de ellos.. Tengo una mejor amiga con la que somos demasiado parecidas. Se llama Katy, estudia gastronomía y tiene un secreto... En el país sólo lo saben su madre, yo y su gata... Por lo tanto, me siento muy afortunada de conocerlo, pero de esto hablaremos otro día.
Aparte de Katy, tengo un amigo que, más que amigo, es mi hermano ya. Fede es increíble, nos pasamos el día hablando, filosofando y riéndonos, por supuesto, de todo y nada a la vez. Él es una especie de Bruno Mars en potencia, aún no es una superstar, pero algún día lo será. Y cuando ello ocurra, yo voy a estar ahí siendo su manager, me lo tiene prometido.
Infinidades de momentos son los que paso con ellos. Nos apoyamos cuando no nos sentimos tan bien o nos pasa algo. Reímos, hablamos y volvemos a reír. Sólo tendré dos buenos amigos, pero se siente como si fueran millones...
Por eso en esta vida, en el camino en que nos vamos abriendo en este mundo, oscuro e iluminado a la vez, hay que saber distinguir a esas personas que te alegran el día, te sacan una sonrisa de la cara o te dan su hombro para que llores. Hay que valorarlas, saberlas cuidar y devolver esa luz que te dan.. devolverla en forma de una buena amistad..
Nos vemos, Ale.
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